La Riqueza del Agua en Sotogrande: Una Perspectiva Histórica y Ambiental
Cuando el Coronel Joseph McMicking compró Sotogrande en 1962, el acceso al agua fue un gran atractivo para el desarrollador estadounidense. Insistió en que cualquier tierra que comprara en España debía tener un buen acceso al agua. Por lo tanto, compró las 1.800 hectáreas (4.447 acres) que hoy conocemos como Sotogrande.
Sotogrande se beneficia de tener el río «Guadiaro» que atraviesa el área hasta el mar, adyacente a la Marina y el Puerto. El río se alimenta de los lagos muy prolíficos en «Grazalema». Es importante señalar que «Grazalema» tiene el índice de lluvia más alto de España y está a solo una hora y media en coche de Sotogrande.
Además, Sotogrande cuenta con un gran subacuífero donde se recoge el agua, así como numerosos lagos para retener y almacenar la lluvia. Nuestra zona circundante también se beneficia de un rocío adicional creado por el Peñón de Gibraltar. El Peñón tiene grandes formaciones de nubes que se forman sobre él, lo que a su vez proporciona una mayor humedad natural al campo. Cuando mire nuevamente hacia Gibraltar, podría notar una nube que cuelga sobre el peñón. A menudo parece el sombrero de un torero, y los lugareños se refieren a él como «La Montura del Torero».
Sotogrande realmente es rica en agua y, en el pasado, cuando ha habido restricciones de agua en la costa (por ejemplo, en 1995), nunca ha sufrido escasez de agua.
Los tiempos han cambiado y hemos observado que el recuento de lluvia en Andalucía es menor. Esto, combinado con más construcciones, más tierras de cultivo irrigadas (los peores infractores) y campos de golf, ha puesto naturalmente presión en la disponibilidad de agua.
Afortunadamente, Sotogrande se ha preparado para esto y sus campos de golf tienen numerosos lagos, y el agua se filtra y reutiliza. Los desarrolladores han alentado la instalación de más salas de ducha en lugar de baños. La comunidad ha recordado y necesita recordar a los residentes que sean cuidadosos y no caigan en la costumbre de regar excesivamente sus jardines. De hecho, demasiada agua dañará un jardín mediterráneo.
Por lo tanto, todos debemos ser cuidadosos y no desperdiciar agua, considerándonos afortunados de vivir en un resort tan verde y rico en agua.